FIC ´´EL FIN DEL MUNDO´´, Capítulo N° 41, Relato Romántico basado en la persona de Robert Pattinson.

Escritora y Guionista: Ximena Morales.

Dirección de Fotografía: MIX de Stock.

Capítulo relatado por ´´ELLA´´

... Cuando Tom ve a Rob llegar,  corre a su encuentro y lo abraza.  Su padre lo mira con una ternura infinita, lo toma en sus brazos y luego lo sienta sobre sus rodillas, le ofrece una galleta de chocolate.  Mientras lo besa y le habla con cariño, Tom ríe de gusto, Rob también, Lizzy los mira a ambos complacida. Desde mi mesa no puedo dejar de contemplarlos. Siempre me he preguntado, cual de los dos es mas hermoso... y no me puedo responder.

- Parece que el ´´muñequito´´ quiere impresionarte, comportándose como todo un padre - Comenta Miguel Alfonso, en voz baja, apegándose a mi oído. Le golpeo el brazo para que se calle, pero el se ríe a carcajadas. Pareciera disfrutar con toda esta situación. A pesar de que quiero a mi amigo, me siento incomoda. No quiero que Rob se forme malas impresiones y piense que entre Miguel Alfonso y yo pueda haber algo... que tonta soy.  Si Rob solo viene por el niño... no por mi. Pienso con tristeza, mientras me regodeo mirando a los ocupantes de la otra mesa. Rob no me mira, solo se preocupa del niño, esta indiferencia suya hace que sienta mucha tristeza.

Después de almuerzo recorremos todo el lugar, Miguel Alfonso no se cansa nunca, seguir su ritmo es agotador, siempre ha sido demasiado activo.

 En las afueras del hotel se filman algunas escenas de la película, está Rob con el protagonista masculino, le da indicaciones  (que ganas de quedarme a su lado, y poner atención a sus instrucciones, la curiosidad por saber de que va el film , me llena de curiosidad...). 

Se mueve para un lado y otro, revisa las cámaras y cada toma que en ellas se ha imprimido, si algo no le gusta, lo repite nuevamente. Me fascina verlo trabajar. Además  se ha quedado toda la tarde con Thomás, que no me ha querido acompañar, por estar al lado de Rob. Es increíble pero el niño, siente una extraña fascinación por su hermoso padre y por todo lo que este hace. Si Rob se lleva sus manos para acariciar su cabello, Thomas también lo hace, Si Rob cruza sus brazos cuando conversa... Thomás también lo hace. Caminan por todas partes juntos y conversan entre si. Cuando se hace una toma y Rob pide silencio, Thomas se queda muy calladito a su lado observando todo con los ojos muy grandes... Creo que de a poco mi adorable hijo también está cayendo bajo el embrujo de cine. Que mas se puede pedir... de tal padre... tal hijo. Jhon se encuentra cerca de ellos, con otros camarografos , cuando me ve levanta su mano en señal de saludo, Rob se voltea para ver a quien el chico saluda y se encuentra conmigo, me mira fijamente con rostro severo, se gira rápido y vuelve a concentrarse en su trabajo otra vez. Sigo toda la tarde de un lugar a otro, al compás frenético de un exigente Miguel Alfonso.

... El primer grupo musical contratado por mi socio,  ya se encuentra en el lugar.  Seis hombres morenos; Cubanos, puertoriqueños y colombianos conforman la agrupación musical. Ahora están acomodando sus instrumentos en el escenario que se encuentra al costado del comedor. Deben dejar todo preparado para que esta noche su presentación salga perfecta. Ya se han enterado que hoy tocarán para el ´´REY MIDAS´´ del cine actual.

... ¡UFF!... por fin tengo un respiro.  Miguel Alfonso dice que tomará un baño y que nos encontraremos a la hora de cenar en el restorant. Así que aprovecho de descansar un rato, le aviso a Barbara que esta noche acompañaremos a Miguel  en la cena.  También le pido que mi Thomás se vea perfecto ya que quiero que el también nos acompañe.  Es Viernes y le daré licencia para acostarse un poco mas tarde. La compañía de mi amigo me anima bastante, después de tanto trabajo y de sentir tanta angustia por la presencia y el comportamiento frío de Rob. Será bueno distraerme un poco, además tengo ganas de escuchar un poco de música, al final pienso que ha sido bueno traer un conjunto de música tropical, ésta es alegre y me subirá el ánimo, que lo he tenido bastante alicaído en estos últimos días.

... Cuando bajamos al comedor junto a Barbara y con Tomás de mi mano, me doy cuenta que mi pequeño se ve adorable. Lleva puestos unos jeans y una chaqueta azul, encima de una camisa a cuadros roja. Vamos casi a tono con Tom, también llevo jeans, un top muy moderno que deja todos mis hombros al descubierto  y unas botas en punta muy altas.  Encima llevo un hermoso echarpe verde de lana de oveja magallanica.  Barbara me ayudo a peinarme y desenredó suavemente mis rizos, quedaron tan vaporosos, que parezco un león en plena sábana africana.  Me río por la comparación, le pregunto a Barbara si no será mejor que recoja mi pelo en un moño.

- No cariño, así te vez preciosa, solo ponte algo de brillo en los labios - me recomienda Nany, cariñosa.

- Pero tu sabes que no soy muy amiga del maquillaje -le respondo riendo.

- Hazme caso, ponte un poquito de brillo, resaltará mas tu boca.  Ustedes las latinas tienen los labios bastante carnosos, muy bonitos, así que tienes que sacar partido de ello. También deberías ponerte bastante perfume, incluso en esa frondosa cabellera que tienes. Eres tan hermosa cariño, así que esta noche... a deslumbrar - me comenta Barbara divertida, mientras me guiña un ojo. Que va vestida de lo más elegante con un traje dos piezas y un hermoso collar de perlas que adorna su cuello. Ella misma  acomoda el echarpe sobre mis hombros y baja un poco mas el top de mis hombros.  Así estas mejor, me dice. Me miro al espejo, el tono verde del echarpe hace que la cabellera aleonada rojiza que tengo, brille como si fuera fuego, una sonrisa estúpida se me escapa al pensar en semejante comparación.

Cuando llegamos con Barbara y el niño al comedor, Miguel Alfonso ya se encuentra sentado en una mesa especial al centro del lugar.  Junto a el están la pareja de ancianos, Renata y Domenico que fueron invitados por mi, para cenar esta noche con nosotros.  Muy cerca de nuestra mesa se encuentra la de Rob, es la mas grande de todas, está sentado con todo su equipo.  El está al centro de cabecera de mesa , se ve hermoso, parece un rey, acompañado por su séquito. Lizzy se encuentra sentada a su lado derecho, al otro costado está su estrella principal... en la forma en que lo mira, creo que a estas alturas ya se cree su princesa...

- ¡¡ESTUPIDA!! -  le grita mi voz interna. esta noche esta mas recuperada y también ha bajado con nosotros a cenar.

Cuando llegamos a nuestra mesa, los hombres, Miguel Alfonso y Domenico, se paran para saludarnos. Como siempre mi amigo me besa y abraza con mucho cariño.

-´´ Deliciosa´´ - me susurra al oído...  y me mira con cara de eterno enamorado.

- ¡BELLA, BELLISSIMA!, esta noche estás mas bella que nunca - exclama el anciano en su adorable acento italiano, y me abraza con esa efucividad suya que lo caracteriza. Ambos hombres también saludan a mi Tom con mucho cariño.

Entonces miro la mesa de Rob, para saludar a Lizzy. Todos tienen la vista fija en  nosotros...  incluso el muchachito Jhon  que se ha levantado de su asiento.  Pero el hombre que se encuentra a su lado lo jala de su ropa y lo obliga a sentarse nuevamente.  Rob se muerde los labios mientras nos mira insistentemente. Ahora inclina su cabeza, para poner atención a lo que su estrellita le susurra al oído.

- ¡HORRIBLE, TE VES HORRIBLE!, esto no es Hollywood... llevas demasiado brillo, y exageras de maquillaje... - la critica la voz, que ahora se las da de comentarista de moda...

... La comida está deliciosa;  Cordero al palo, típico de la región de Magallanes, con agregado de verduras de la huerta orgánica del hotel, vino o jugos naturales para acompañar.  La conversación es bastante entretenida, con Miguel Alfonso y Domenico que hacen muy buenas migas entre ellos y Thomás que de vez en cuando se une a los comentarios  dando su graciosa opinión.  Todos se mueren de la risa al escuchar a mi pequeño amor, Tom es demasiado encantador.

 Pero yo estoy mas al pendiente de lo que sucede al otro extremo de la mesa de al lado.  Desde mi posición Rob ha quedado frente a mi.  Lo veo conversar y reírse muy animado.  Todos están pendientes de lo que él habla y se ríen a carcajadas con sus ocurrencias.  De vez en cuando me mira, y se moja los labios. Cada vez que hace eso, debo acomodarme en mi asiento para no caer y desvío la mirada a otro lado.

La orquesta ya se encuentra ubicada en el escenario, para comenzar con su música. Miguel Alfonso como buen anfitrión,  se para de su asiento y se dirige hacia donde se encuentran los músicos, dispuestos a empezar a tocar.  Le pide a Tom que lo acompañe y se lo lleva de la mano.  En esos momentos Rob se para de su silla y se sienta nuevamente.  Veo la mano de Lizzy apoyada en su brazo, Rob se acomoda otra vez en su silla inquieto.

Miguel Alfonso, con esa personalidad que siempre lo ha caracterizado,  se para al medio del escenario. Pide un poco de silencio y se dirige  a toda la concurrencia. Les explica que se trata de un grupo latinoamericano que difunde la música del caribe y que este tipo de ritmos son muy típicos de nuestro continente.  Además les comenta que es un regalo para los norteamericanos y europeos.  Que el sabe que ellos están mas acostumbrados al rock...  pero que este tipo de música es muy nuestra y es una muestra de lo que estamos echo los latinos...  ¡PURO FUEGO!...  con este discursillo, Miguel Alfonso se ha echado a toda la concurrencia en un  bolsillo... menos a uno, que desde su mesa, y con una botella de cerveza en la mano... lo mira con cara de pocos amigos.

... Miguel Alfonso presenta a la orquesta y los morochos encantadores comienzan a hacer sonar sus instrumentos. Primero un solo de piano, luego se incorporan los bronces y timbales, y un suave ritmo salsero se apodera del lugar. Tom está en la pista de baile con la boca abierta mirando como los hombres ejecutan sus instrumentos, no quiere volver con su padrino.  Así que me levanto de la mesa  y lo voy a buscar.  Mi pequeño no quiere regresar, está encantado escuchando la música.

- Vamos amor, volvamos a la mesa - le digo en forma suave y con mucho cariño.

- NO QUIERO MAMÁ - me responde, enfurruñado.  Lo tomo de la mano para traerlo de vuelta, cuando me doy cuenta que como buen músico, Thomas marca el ritmo con sus pies, sonrío de gusto y le digo si quiere bailar, el me dice que bueno, con esa voz exquisita y aplaude riendo.  Mi hermoso hijo cada día me sorprende mas. Lo tomo de las manos y me muevo al compás de la música, 1,2,3,...1,2,3, le muestro a Tom como debe mover sus pies. Tom es demasiado inteligente, recepciona todo bastante rápido. Además es muy rítmico... (creo que al fin hay algo que Thomas ha sacado de mi. Al fin y al cabo es 50% inglés y 50% latino, aunque sus rasgos digan lo contrario).  Hago girar al niño sobre su cuerpo y este se ríe a carcajadas. Mi hijo  está que no da más de felicidad.  Yo también me contagio con su alegría.  Lo tomo en mis brazos y continuo girando con él en  medio de la pista de baile, mientras me muevo al compás de la música.

 El moreno solista entona una canción de amor, bastante sensual, así como son las letras de este tipo de música. Con lo entretenida que estoy no me doy cuenta que Lizzy se  encuentra a nuestro lado, creo que viene a ver a Thomás como baila, entonces me percato que todos nos siguen mirando, atentos a cada uno de nuestros movimientos.  Jhon se encuentra apoyado en una pared, cerca de la pista de baile, con las manos cruzadas en su pecho, sin poder quitarme la vista de encima. Pareciera ser que tiene su boca abierta... Entonces  Lizzy  en forma alegre, me pide que le enseñe a bailar.

- ¿Qué?, estás segura de lo que me estás pidiendo - le pregunto dejando a Tom en el suelo.  La tomo de la mano , mientras con la otra tomo al niño nuevamente.

- Mira Lizzy... pon atención.  Junta tus piernas, estira una hacia el lado, cuenta 1,2,3,y vuelve al centro, luego haz lo mismo con la otra pierna 1,2,3, y al centro, junto con todo esto mueve tus caderas - Lizzy se ríe del movimiento y lo intenta.

- Es que no puedo, no me sale igual que a ti - me dice la tía de mi hijo, con cara de pena , encogiéndose de hombros.

- Repítelo conmigo otra vez...  es fácil.  Solo tienes que coordinar tus caderas con tus piernas... eso es todo - y la hago bailar al compás de la música.  Primero me muevo despacio, para que ella entienda. Con tanto movimiento siento calor, así que me saco el echarpe, dejando mis hombros al descubierto. Suelto la mano de mi hijo, y tomo por la cintura a su tía, para explicarle bien cada paso.  Me muevo agitando mis caderas al ritmo de la música...  Lizzy se ríe divertida, dice que le cuesta demasiado, y que en estos momentos se arrepiente de ser tan inglesa. Ante esta ocurrencia de Lizzy, ambas soltamos una gran carcajada

- ¿Cómo lo haces?, ¿Cómo mueves las caderas de esa forma? - me pregunta Lizzy curiosa, mientras sigue riendo.

- Es que soy latina...  esa es la única explicación que te puedo dar - le respondo con una gran sonrisa en la cara mientras le guiño un ojo. En estos instantes la canción termina, y nos abrazamos Lizzy, Tom y yo, en forma cariñosa riendo.

...  Comienza un nuevo tema...  veo a Miguel Alfonso que se llega muy rápido a mi lado, me toma de la cintura y de la mano.  Llevándome  al centro de la pista.  Lizzy sigue intentando bailar de la mano de Thomás. Bailar con mi mejor amigo es diferente,  me guía en forma perfecta al compás de la música.

*ESTOY ENAMORADO DE TI... ETERNAMENTE*

Canta el moreno arriba del escenario. Miguel Alfonso me hace girar una y otra vez, luego me apega a su cuerpo.

- ¿Te acuerdas cuando te eligieron reina de la universidad?...  después bailamos toda la noche-----habla Miguel muy alegre.

- Como no me voy a acordar, si tu fuiste el generalísimo de mi campaña, gracias a ti gane - le respondo.

- Ese día estaba muy cansado, pero no dejé que nadie mas bailara contigo.  Así que esa noche me propuse ser el mejor bailarín, para ti - al decir esto, mi compañero de baile levanta sus cejas divertido, mientras me vuelve hacer girar bajo su brazo, para atraerme nuevamente a su cuerpo.

- Egoísta - le respondo con una sonrisa.

* TE AMO MÁS QUE A NADIE... LOCAMENTE...*

Sigue entonando su canción, el moreno en medio del escenario. Miguel Alfonso recorre toda la pista de baile conmigo en sus brazos.  Todos nos miran... incluso Rob. Parecen estar encandilados por el compás de nuestros movimientos.

- Parece que Pattinson, sigue molesto - dice Miguel, en mi oído.

- Y a ti que te importa - le contesto en tono regañón. 

- Me importa, porque ahora está sufriendo - y entrecierra sus ojos, malévolo.

- Son impresiones tuyas. Creo que tienes demasiada imaginación. Debe estar cansado... trabaja demasiado. - le digo.

- Si estuviera cansado, estaría durmiendo, pero sigue apegado a su silla.  Mirando como te mueves, preciosa... ese hombre se está muriendo de celos. - vuelve a comentar en tono burlesco.

* TE AMO , TE AMO, LOCAMENTE...* , continua la canción.

- ¿De dónde sacas esas cosas Miguel Alfonso? - le pregunto.

- De la forma en como nos mira - y me vuelve a guiñar uno de sus ojos divertido.  Mi amigo disfruta demasiado con esta situación.  Mientras me hace girar varias veces bajo su brazo, con el comentario de Miguel Alfonso no puedo evitar mirar a Rob, que se encuentra completamente apoyado al respaldo de su silla, mientras bebe un gran vaso de cerveza.

La canción termina y todos aplauden.  Menos Rob, que sigue bebiendo, pero ahora también está fumando...  me mira en forma fija, con esos ojos azul-gris, ya  no son fríos como el acero, ahora emanan llamaradas, parecen hechos de fuego...

C O N T I N U A R Á...


Capítulo N° 40 AQUÍ