Londres, Día del evento para la fundación Welleslley.
- ¡Carolina ha llegado el estilista que te maquillará y peinará para esta noche!- Es el llamado de Sofi, que me busca por toda la casa. Mientras Richard y yo, estamos escondidos en su oficina, besándonos como un par de adolescentes. Así es como han sido estos días,desde que Madame Lacroix llegó a la casa.
Cada vez que podemos, nos arrancamos para estar solos.
Por suerte Richard no ha vuelto a insistir en dormir conmigo. La otra noche cuando estuvo en mi cuarto, solo fue para darme las buenas noches. Me dijo que él comprendía, que me sintiera cansada, por todos los acontecimientos que habían sucedido ese día. Pero que no quería irse a dormir, sin darme un beso. Yo agradecí su gesto... y también le dije que no era correcto que durmiéramos juntos, ya que George se podría despertar en cualquier momento, y Sara tendría que venir a buscarme.
Además yo pensaba que sería una falta de respeto para su madrina y su papá... que no estaban totalmente enterados de lo nuestro, y que por el momento, nuestra situación era un poco complicada de explicar.
Richard escuchó con mucha atención mis argumentos... y con una sonrisa entre burlona y picara, me dijo que tenía razón. Pero que no me prometía nada, porque cada vez que estaba a mi lado, las ganas por hacerme suya, no se las aguantaba...
Al final me volvió a besar, como solo él sabe hacerlo... y la verdad... la que estuvo a punto de no aguantar las ganas por dormir con él, fui yo...
El día siguiente, lo pasamos en familia. Sofí Lacroix, cuando no está al mando de la casa de modas es una mujer muy sencilla y cálida. Se preocupó por saber como está el niño. Que por suerte, amaneció más animado y con mucha alegría pudimos comprobar, que las ampollas sobre su cuerpo, tampoco aumentaron.
También se mantuvo ocupada, con la ropa que llevará Sir Arthur, que en un comienzo se rehusaba a asistir al evento, pero ahora que llegó Sofí, dice que no se lo perderá por nada del mundo. Ni hablar de la ropa de Richard, ella misma le ha traído desde París, un elegante traje, de una prestigiosa marca.
A cada rato repite, que su ahijado, será el hombre más guapo de la fiesta, y que al otro día, los tabloídes, lo nombrarán como el hombre más guapo y mejor vestido de Londres... Me muero por ver a Richard luciendo esa ropa, esta noche. Él es tan apuesto, que no pasa desapercibido para el sexo femenino. Me di cuenta de eso, la primera vez que me invitó a salir, y caminamos por las calles de Bath... Muchas mujeres, no se resistieron, y se dieron vuelta para mirarlo. Yo, por mi parte, me sentía complacida, por que él ese día, fuera mi compañero en ese paseo.
... No puedo negar, que ahora, me siento más complacida aún de que un hombre así, se fijara en mi...
La voz de Sofi, se escucha mas fuerte, eso significa, que debe andar cerca de la oficina. Richard y yo nos besamos por última vez, y aunque nos cuesta mucho nos separarnos. Salgo muy rápido, de la habitación. No quiero que Sofí, nos encuentre a solas. Ella sabe que le debo un par de explicaciones. Le prometí contarle la verdad a Richard, y aún no he podido cumplir esa promesa...
La verdad... es que no quiero hacerlo por las consecuencias que esto pueda traer... Tendría que dejar a Richard, y eso me duele demasiado. Ya no concibo un mundo sin él.
Sé que no estoy haciendo lo correcto. Ya debería haberle contado la verdad. Pero esta verdad, es demasiado injusta, porque me alejaría por completo del hombre que amo.
También soy consiente, que la verdad, por más que la trate de ocultar... igual saldrá a la luz, el día menos pensado... pero si está en mis manos, retrasar ese día, lo seguiré haciendo. Porque cuando ese momento llegue, no tendré más remedio que abandonar la mansión e irme de su lado...
Por más vueltas que le de a esta historia, he llegado a la conclusión que no tiene un final feliz. Así que aprovecho cada momento para estar con el amor de mi vida. En mi corazón voy almacenando cada beso, cada caricia... ellos serán mi consuelo para cuando esté muy lejos de Richard...
- Carolina... niña... al fin te encuentro. - Me dice Sofi, mientras nos encontramos en medio del pasillo. Le dirijo una sonrisa encantadora. Pero a pesar de mi cordialidad, ella me mira de forma inquisidora.
- ¿Estabas con Richard... cierto? - Me pregunta en forma directa.
- ... No... no... usted se equivoca. - Le contesto un poco nerviosa.
- No me mientas. Me puedo dar perfecta cuenta que estabas con él. Lo sé por el brillo de tus ojos. Además traes los labios hinchados y sin una gota de labial. Ni hablar de tú pelo desordenado y los botones desabrochados de tú blusa. Yo sé que este pasillo, llega directo a la oficina de Richard. Después no existe ninguna otra habitación. - Me dice la Madame, en tono enojado y afrancesado.
- Le puedo explicar todo Sofi. - Le contesto con vergüenza.
- No necesito que me expliques nada Gracia. A quien debes darle explicaciones es a Richard. Yo solo quiero evitar que él sufra... y tú también cariño. Crees que no me he dado cuenta de como se miran. Recuerda que yo pasé por todo eso con su tío. - Las palabras de la mujer yo no son duras, ahora el tono de su voz, es más bien comprensiva.
- No sabes lo difícil que es para mi, contarle la verdad Sofí... Cuándo eso suceda... lo perderé para siempre... y eso me duele... - Le contesto apenada. Madame Lacroix, mueve su cabeza antes de contestar.
- Te entiendo demasiado bien. Pero pienso que aún es tiempo. Y si lo haces, al menos tendrás un punto a tú favor. Quizá Richard, podría ser benevolente contigo. No dejes pasar el tiempo. Piensa en que algo irremediable, podría llegar a suceder. Y que él se entere de la verdad, por medio de terceros, sería una verdadera desgracia. - Me contesta preocupada.
- Estoy consiente de la situación Sofí. Muchas veces lo he intentado. Pero siempre pasa algo, y no podemos hablar. Además cada día me siento más enamorada de él... no lo puedo evitar... - Le digo a punto de llorar.
- ... Cariño... si yo pudiera hablar con él... Pero no puedo. Eso es algo que solo tú puedes hacer. Mira... Creo que hoy no es el momento. Estamos a punto de participar en un evento social, muy importante para esta familia.
Richard debe lucir radiante. Sería feo que esta noche el hermoso presidente de la fundación Welleslley, luciera amargado y enojado. Además tampoco se vería bien, que la supuesta viuda, de Henry, luciera unos ojos hinchados por el llanto. Eso daría pie a demasiadas especulaciones. Tú no sabes como es la gente de sociedad. Detrás de tanta opulencia y elegancia, muchas veces se esconden corazones despiadados. Comenzando por el corazón de Samantha Foxley... Así que ahora, no quiero que llores. - Me advierte la mujer en tono maternal. No hallo que contestar, así que la abrazo en forma cariñosa.
- Sabes una cosa Gracia... tengo una sensación extraña. Creo que debes hablar con Richard, esta misma noche, una vez que regresemos a casa... Además aprovecha que estoy de visita en la mansión. Él siempre me ha escuchado... y yo podría interceder por ti... - Me dice la mujer en mi oído.
Lo que Sofí me comenta, me deja preocupada... ¿Pero que podría pasar?, me pregunto en silencio, mientras vamos caminando hasta la habitación que ahora ocupa Madame Lacroix.
En ella se encuentran un hombre y una mujer. Sofí me dice que son unos amigos londinenses. Él es uno de los mejores estílistas de UK, y la chica es su ayudante. Ellos serán los encargados de maquillarnos y peinarnos a todos.
Sofí les muestra mi vestido a ambos. Entonces les explica cual es la idea que tiene sobre mi maquillaje y mi cabello. Luego me deja a solas con ellos, aduciendo que ahora va a buscar a Richard, para que tome un baño y luego se arregle para esta noche.
Mientras el hombre y la mujer conversan sobre la forma y color de mi cabello, más mis rasgos latinos. Yo pienso en las palabras de Sofí... Llego a la conclusión, que ella tiene toda la razón... Después de la fiesta, me arriesgo y le confieso todo la a Richard. Tal vez si me sincero... él por lo menos, podría ser más condescendiente conmigo... a la hora de juzgar. Se me estruja el corazón, de pensar en lo que puede pasar, cuando le cuente la verdad.
Una ducha demasiado larga, pensando en lo que pasará esta noche, después que le cuente todo a Richard, también hizo que me retrasara, a la hora de que me peinaran y maquillaran. Al final fui la última en estar preparada.
Sofi, me ayudó a vestirme. Ella en persona quería dar el visto bueno sobre mi imagen. Cuando finalizamos los arreglos, ni yo misma, podía creer, que la mujer, que se veía reflejada en el espejo... era yo. Abracé muy fuerte a Madame Lacroix, para darle las gracias.
- ¿Te gustó el diseño del vestido... Gracia.? - Me preguntó muy despacio en el oído, con ese tono afrancesado suyo, tan especial. Debo reconocer que me emocioné un poco. Hace mucho tiempo, que nadie me llamaba tantas veces por mi nombre real.
- Es maravilloso Sofi. Te estoy muy agradecida. Porque la verdad, yo no entiendo mucho de moda. Y no hubiese sabido que elegir. - Le digo, mientras nos tomamos de las manos.
- Cuando lo diseñe, me inspiré en muchas cosas. Sabía que el verde haría juego con el color de tus ojos. El escote de corazón, era para resaltar tus curvas. Y para la parte de abajo, lo hice vaporoso. Desde que te vi, a pesar del parecido, supe que no eras Carolina, porque ella es más carnal. En cambio tú, eres mucho más etérea... Además, tienes que lucirte esta noche. Porque este modelo, compite con las creaciones de la presuntuosa Samantha Foxley... Me muero de la curiosidad por saber, de que trata su colección. Ella piensa que el ser joven y vanguardista, le abre todas las puertas en el mundo de la moda... Y no respeta a los diseñadores con más edad.
Ahora bajemos, se nos ha hecho tarde, recuerda que estamos en Inglaterra y abajo nos esperan Richard y su padre, dos enfermos maníacos de la puntualidad. - Termina de hablar Madame Lacroix, mientra me guiña un ojo y me toma fuerte de la mano, poco menos que arrastrándome hasta las escaleras. Ya en ellas, ambas con tacones altos, bajamos con sumo cuidado. Yo me río muy fuerte, porque Sofí tiene mucha vitalidad y unas reacciones encantadoras, como si fuera una mujer mucho más joven. También tenía razón. Richard y Sir Arthur nos esperan a los pies de la escalera, en su rostro veo que se encuentran un poco inpacientes. Pero como ambos son unos perfectos caballeros ingleses lo disimularán.
... No puedo dejar de mirar a Richard, mientras voy bajando... está tan guapo... demasiado diría yo... Enfundado en un traje oscuro de gala.
Sir Arthur no se queda atrás. Se nota que de joven, tiene que haber sido todo un galán... Además sus ojos brillan encantadores, cuando toma la mano de Sofí... En ese momento, Richard estira la suya, para coger la mía. Tiemblo ante su mirada y al contacto de su piel...
Muy a mi pesar, viajamos en autos distintos hasta Londres. Yo me fui en compañía de Sir Arthur, y él con su madrina. Yo creo que fue por varios motivos. Si hubiésemos viajado solos, a estas alturas yo estaría en los brazos de Richard, y todo el tiempo invertido en nuestros atuendos estaría depositado en el tacho de la basura. Y la segunda opción, es que, es mucho más decoroso que lleguemos distribuidos de esta forma.
Samantha sabe lo que está pasando entre nosotros... y Richard lo que menos quiere, es echar a correr rumores sobre nuestra relación. Si nos ven llegar juntos, es muy probable, que Samantha le pueda contar a alguien. Y los chismes se comenzarán a expandir, como un reguero de pólvora.
Así que estoy consiente que esta noche, será muy poco, lo que podré estar cerca de Richard... Aunque me cueste... solo lo podré mirar de lejos...
Me asomo por la ventanilla del carro y ya puedo divisar las luces que nos indican, en donde se llevará a cabo el evento.
Al bajar del vehículo, un viento helado ondea la parte baja del vestido... Miro hacia arriba. Entonces las luces de un avión que cruza el oscuro y nublado cielo londinense, llaman mi atención... No sé porqué... pero un dolor agudo, atraviesa mi corazón...
C O N T I N U A R Á...
MI QUERIDA GRACIA DEJASTE PASAR MUCHAS OPORTUNIDADES ASI QUE CREO QUE ESTA CERCA QUE SALGA TODA LA VERDAD!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!1
ResponderEliminarLA BRUJIS VENEZOLANA!!!!!!
.... Pobre Gracia... de esta noche... no pasa...
EliminarBesos Bruji!!
PD: En los próximos capítulos hay un regalo para ti... ;))
MIXXXXXXXXXXXXXX GRACIAS LO TOMARIA DE CUMPLE YA QUE ESTA SEMANA ALCANZO OTRA DECADA EN MI VIDA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!1
EliminarLA BRUJIS VENEZOLANA!!!!!!!!!!
Al parecer la suerte de Gracia está echada.
ResponderEliminarMe inquieta saber lo que vendrá.
Henry y Carolina están llegando.
Que nervios, Mixxx!!!
Besos.
Sip, Liz... ya no se puede volver atrás.
EliminarBesos!
Se acerca la hora de la verdad, presiento que a Gracia no le dará tiempo de decir nada y van a terminar muchos lastimados.
ResponderEliminar... No alcanzará a decir ni PÍO... ja ja ja
EliminarMMMM... el regalo de la brujis, también va para ti... ;)
Bueno solo queda esperar para saber qué sucederá con Gracia, demoro tanto en contar la verdad.... Ojalá que Richard comprenda que todo se complicó sin que ella tuviera intención de mentir en el inicio de todo.....
ResponderEliminarMixx un capítulo interesante, eres una genia nos tienes completamente enganchadas con la historia. Espero con ansias el próximo capítulo
Besos
KG
...Sucederá lo que tenga que suceder Karlita. Así es el destino..
EliminarSabes lo que a mi me tiene intrigada... es la reacción de Richard. Porque más que mal, él fue el culpable, de la mentira de Gracia... Ahora que se las aguante... jajaja
Gracias por tú comentario, y por tus palabras hacia mi.
Besos!