… ¿Qué puedo decir… ?... Yo creo que nada. Era de esperar que
Madame Lacroix se diera cuenta de la verdad. Ella conoció a la verdadera
Carolina…
- Me puedes decir
quién eres… y el porqué de esta ´´gran´´ mentira. Solo te advierto una cosa… No
sales de la casa de modas, sin que me digas la verdad. No entiendo como has
podido engañar a Arthur… y lo que más me preocupa a Richard… no quiero ni
imaginar cual sería la reacción de ´´mi muchacho´´, si se entera de este
engaño… - Me dice la mujer en tono amenazante.
-Todo tiene una
explicación Madame Lacroix… solo le pido que me escuche… - Le contesto a la
mujer con voz suplicante.
- Quiero la verdad…
´´muchachita´´´. Conmigo no vas a jugar, como lo has hecho con los Welleslley.
Acaso no te das cuenta que estás cometiendo usurpación de identidad y eso es un
delito. El cuál se paga con pena de
cárcel. – Me vuelve a decir la mujer. Por el tono grave de sus palabras se nota
que está muy enojada.
- Yo le voy a contar
la verdad… pero por favor… Richard no se debe enterar de nada… - Le digo a la
mujer con el mismo tono suplicante, de mi respuesta anterior.
_ ¡Richard!...
¡Richard!... por lo visto es lo único que te importa. Pues te voy a decir algo,
´´señorita perfecta desconocida´´. Si Richard se llega a enterar de tú mentira,
estás condenada a vivir el infierno en la tierra.
Ahora te voy a dejar algo muy en claro. Cuando
los encontré abrazados, me di cuenta que entre ustedes no existe una simple
amistad… Y eso me preocupa… Si hay algo
que no voy a permitir, es que sea Richard quien pague los costos de tú engaño…
te juro que si le haces daño a mi niño… yo misma te haré sufrir las penas del
mismo infierno. Así que me das una buena explicación… O ahora mismo llamo a las
autoridades para poner fin a esta situación – Madame Lacroix habla fuerte y
claro, está muy molesta, y en cierto grado tiene razón. Me siento angustiada,
también apenada… y porque no decirlo, avergonzada. Sofí Lacroix me juzga como
si fuera una criminal. También me advierte cual podría ser la reacción de
Richard, y eso me parte el corazón.
- … Vamos niña, estoy
esperando que me cuentes la razón de tú mentira. – Son las palabras de Sofí Lacroix. A la espera
de que comience hablar.
- ... Primero que todo
Madame… le confieso que esta situación no ha sido planificada. Y tampoco tengo
la intención de causar algún daño a la familia Welleslley… Fue el mismo Richard quien me obligó ser
parte de esta mentira…
… Entonces le cuento a
la mujer, que mi verdadero nombre es Gracia, la hermana de Carolina. Y
todo lo que ha sucedido desde que Richard, cruzó nuestra puerta, aquella calurosa
tarde en Miami y me amenazó, que con… o
sin mi autorización se llevaría a George a Inglaterra. Le explico que si hice todo lo que he hecho,
ha sido por amor a mi hermana y a mi sobrino. Yo sé que la verdadera Carolina
algún día volverá, y yo le prometí cuidar a su hijo, como si fuera mío… Además
fue el mismo Richard, quien me confundió con la madre del niño. Y por ese motivo, usurpé su
lugar… pero nunca imaginé que las cosas se irían complicando. Ya que al
comienzo pensé, que Carolina y Henry, tendrían que aparecer… pero la espera se
ha ido alargando… La mujer me escucha
atentamente, mientras mueve su cabeza a ambos lados.
… También le relato
que me ido encariñado demasiado con Sir Arthur, y él conmigo. Le digo que no
quiero hacerles daño… es solo que le prometí a mi hermana que jamás dejaría
solo al niño. Le recalco, que no tengo intensiones de usufructuar del dinero de
los Welleslley… Y que al comienzo Richard me provocaba desconfianza y miedo. Pero
poco a poco, su carácter ha ido suavizando… y ahora somos… como amigos…
_ ¡Amigos!... Los
´´amigos´´ no se abrazan de la forma en que ustedes lo hacen. Cuando entré a esta
habitación, parecía que salían chispas de sus cuerpos. La forma en que se miran…
no es de simple ´´amigos…´´ Conozco a Richard desde que nació… y te puedo asegurar, que sé
a la perfección, como él piensa y siente. Estuvo todo el rato pendiente de tus
gestos y reacciones… Si no le cuentas la verdad hoy mismo lo haré yo, no voy a
permitir que Richard vuelva a sufrir por un engaño… - Me dice Madame Lacroix,
con su voz afrancesada.
- … Yo amo a Richard… Sofí…
También estoy consiente de cuál l es mi realidad. Solo espero el momento
indicado para contarle la verdad… - Le confieso.
- Y según tú, ¿Cuándo
sería el momento?
Mira… Gracia… estás
metida en un gran lío… Si hay algo que los Welleslley jamás perdonan es la
mentira. Te voy a confesar algo, que muy pocas personas conocen sobre mi
persona. Espero que esta historia te haga recapacitar, y pongas fin a este engaño ahora mismo. O si no, las
consecuencias serán muy dolorosas. Lo digo por ti, y también por Richard, que
es quién en realidad me importa.
– De pronto Sofí Lacroix cambia el enojo que
hay en su voz, para dar paso a una llena de tristeza. Prende un delicado
cigarrillo y toma una gran bocanada de él antes de comenzar con su relato.
- … Arthur y Anthony,
eran un par de apuestos jóvenes cuando
los conocí. Los hermanos Welleslley, eran muy aficionados a visitar Francia
durante su juventud. Yo era muy amiga de Katheryn, la esposa de Arthur y la
madre de Richard. Por intermedio de ella conocí a estos ingleses. Arthur siempre fue muy alegre, le gustaba
disfrutar de la vida. Él era como Henry… en cambio Anthony era mucho más
atractivo, demasiado diría yo…
Tenía un porte distinguido y una elegancia muy
clásica, que lo hacía sobresalir, entre su grupo de amigos. Pero había algo en
su personalidad que llamó mucho mi atención. Era más sobrio, arrogante y tenía un dejo de melancolía en su mirada, que lo
hacía ver irresistible. Las chicas se volvían locas por Anthony… Y sin darme
cuenta me fui enamorando de él.
Comenzamos una relación a escondidas, en ese
tiempo ya estaba consolidada en el mundo de la moda como maniquí, había
trabajado duro, y tenía una posición bastante cómoda. También me llamaron para
filmar un par de películas… Pero mis metas y ambiciones no iban por ese rumbo.
Yo quería mucho más. Aspiraba a tener mi propia casa de modas, quería crear una
marca respetada y reconocida, para eso me partía el lomo día a día. A pesar de
que París es la capital de la moda, cuesta mucho abrirse paso en esta ciudad,
ya que la competencia es dura. Acá debes estar a la vanguardia, ser creativa y trabajar
de noche y de día, para no salir del mercado… es muy fácil que venga otro más
astuto y ocupe tú lugar.
Anthony me visitaba
todas las semanas y durante sus vacaciones, nos arrancábamos a Mónaco… en ese
lugar viví los días más hermosos de mi vida con el hombre que amaba.
.. Anthony era un hombre en todo el sentido de la
palabra… en la intimidad era demasiado apasionado y eso a mi me gustaba.
Nuestra relación se fue consolidando, y él un
par de veces me habló de matrimonio. Yo me ría al escuchar sus palabras. Le
contestaba que aún no estaba lista para dar ese paso, ya que estaba muy ocupada
con mi trabajo… Un día me di cuenta que estaba embarazada… pero no quise
contarle nada. Estaba segura que él me llevaría aunque fuera a la fuerza a
Inglaterra, para hacerme sus esposa y que ese niño naciera dentro de un
matrimonio, como según él pensaba. Anthony Welleslley, era un hombre muy
apegado a las reglas que imponía la sociedad…
Decidí ocultar mi
embarazo, estaba a punto de abrir esta tienda, y ya tenía varios pedidos que
atender. Además estaba organizando el lanzamiento de mi primera colección. Recuerdo
que era Invierno y estaba nevado… Anthony estaba en viaje de negocios con su
padre. Así que había quedado en volver en un par de semanas…
Esa noche fui la
última en salir del taller… Antes de cerrar la puerta que da a la calle, recordé
que se me habían quedado unas muestras de telas, que habían llegado desde la
India. Eran muy importantes, ya que eran la base de la colección, decidí volver
a buscarlas y trabajar con ellas aquella noche. El taller estaba a oscuras,
porque cada noche antes de salir, se cortaba la luz, para evitar algún corte en
el cableado y así evitar algún incendio…
Entonces mis zapatos de tacón se
enredaron en unas telas que habían dejado por descuido en el piso. La caída por
las escaleras fue estrepitosa… Me encontraron al otro día, casi congelada en
medio de un charco de sangre…
… Estuve en la clínica
casi un mes… perdí a mi hijo… el médico dijo que era un niño… La noticia de mi
accidente, salió en algunos medios de la época, acá en Francia y también en
Inglaterra. Anthony suspendió su viaje, y vino a verme… Lo primero que hizo,
fue hablar con mi médico. Por él se enteró de mi estado… y que yo había perdido
a su hijo…
… Aún recuerdo el frío
de sus ojos azules cuando entró a la habitación… su mirada daba miedo…
¡Le explique… te juro
Gracia que le explique mis razones de mil maneras! Le dije que pensaba
contárselo la noche de la inauguración de la casa de modas.
Él me dijo que mis
razones ahora ya no le importaban. Que pensaba que yo lo amaba, y que le tenía
la confianza suficiente, como para contarle que estaba esperando un hijo suyo.
Me confesó que durante el viaje había hablado con su padre, sobre nuestro
matrimonio. Que habían discutido, porque para el señor Welleslley, yo no era la
mujer indicada para él. Ya que Anthony debía elegir entre las señoritas de la
sociedad inglesa, la que debería ser su esposa.
Según Anthony, él y su
padre discutieron bastante, y él no dio su brazo a torcer. Le dijo que se
casaría conmigo. Porque él ya me había elegido para ser su mujer… Entonces supo
del accidente, y viajó enseguida a buscarme… Que nunca se imaginó que se
encontraría con semejante sorpresa.
Para los Welleslley los niños son sagrados…
Ellos nunca han permitido, que algún retoño que lleve su sangre, ande repartido
por el mundo…
Ese día vi por primera
a un Anthony desconocido para mí. Aún recuerdo sus ojos humedecidos… Me sentí
tan culpable… Lo veo como si fuera hoy, inmóvil como una estatua, parado junto
a mi cama. Su rostro frío, parecía esculpido en mármol.
… Le pedí perdón
muchas veces… le dije que lo amaba más que a nada en el mundo… y que estaba
arrepentida por no haber cuidado de nuestro hijo. Cuando nombré al niño Anthony
me miró con desprecio, mientras un par de lágrimas corrían por su hermoso
rostro. Se dio media vuelta y salió muy rápido de la habitación…
… Nunca más volví a
verlo… Pasaron los días, los meses y los años… y Anthony Welleslley jamás
volvió a dirigirme la palabra. Intenté hablar con él muchas veces, pero nunca
aceptó volver a tener algún tipo de contacto conmigo.
Katheryn, la madre de
Richard, era la única que sabía toda la verdad. Para entonces ya se había
casado con Arthur y esperaban a su primer hijo. Ella fue quien me consoló y
ayudo a salir de la depresión en que me había sumido. También fue ella la
encargada en darme la noticia.
A los pocos meses de
nuestro rompimiento. Anthony pidió en matrimonio a Margareth Salburry, una joven
como la que quería su padre. La típica señorita inglesa formada en el seno de
una buena familia.
Poco a poco y con la
ayuda de Katheryn, comencé a salir de mi aturdimiento. Además me fui
encariñando con la creatura que mi amiga llevaba dentro de su vientre… Si mi hijo no hubiese muerto, habríamos
coincidido en la fecha de parto. Al final Katheryn dio a luz un precioso niño,
con los mismos ojos azules de su tío.
Así es como le fui tomando amor al pequeño Richard. La madre de mi amiga era francesa, así que
Katheryn visitaba París muy seguido con el niño. Lo vi crecer, convertirse en
adolescente, en todo un hombre… Y antes mis ojos cada vez que lo miraba, aparecía el
imponente Anthony Welleslley…
Además Katherin era
católica, le pidió a Arthur que el niño fuera bautizado en Francia, él nunca le
negó nada a su mujer porque la amaba con locura, así que aceptó… y yo me
convertí en su madrina…
Por mi gran amiga,
también me enteré que Anthony tenía problemas con su esposa y que nunca se
llevaron bien. A pesar de que Margareth esperaba un bebé… así es como vino al
mundo Henry… Cuando el niño tenía cuatro años. Sus padres viajaban de Londres a
Amsterdam en auto, se dice que iban discutiendo… y Anthony perdió el control
del coche, se salieron de la carretera y fueron a dar contra un muro de contensión…
ambos murieron… ese día por segunda vez volvió a morir mi corazón…
Nunca he podido
olvidar a Anthony… además de vez en cuando, cuando su apuesto sobrino, Richard
Welleslley, decide cruzar el canal para visitar París… lo trae de vuelta hasta mi... Es
increíble el parecido de ambos.
Richard ha sido mi
gran consuelo. Desde pequeño lo quise como si fuera mío.
Tal vez tú te
preguntas si no sentí lo mismo por Henry, que era su propio hijo… A Henry
también lo quise y mucho. Pero el chico era igual a su tío Arthur… Muy apuesto,
espontaneo, divertido… me hacía mucho reír cuando venía a visitarme. La última
vez que lo vi, fue cuando estuvo sentado en este mismo lugar con tú hermana
Carolina. Había un brillo especial en sus ojos y me di cuenta que estaba
enamorado.
En cambio Richard heredó todos los rasgos de
su apuesto tío, sobre todo esa arrogancia y la mirada melancólica que me
gustaba tanto… Es por eso que lo adoro y me preocupo por él.
Fui yo quien consoló a
Richard cuando descubrió a la desabrida
de Samanta Foxley, con su amigo acá en París. Supongo que ya debes estar
enterada de aquella historia. Acá estoy completamente de acuerdo con la
reacción de Richard... Samantha no se merece su amor…
Ahora ya tienes muy
claro Gracia, lo que va hacer de tú vida, si Richard se entera de tú mentira… -
Es así como Sofí Lacroix termina su conmovedor relato. No me puedo aguantar las lágrimas y lloro. La
historia de esta hermosa mujer es muy triste. Anthony Welleslley la condenó a
vivir en soledad, tan solo por el hecho de mentirle… ¿Será que correré la misma
suerte?. Entonces lloro con más intensidad mientras me arrojo en los brazos de Madame Lacroix, para que me consuele.
C O N T I N U A R A...
Hoy me he quedado sorprendida. Una historia dentro de otra historia. Alto impacto la reacción del tío. Pobre chica, está condenada, pero algo pasará que ablande el corazón del hermoso Richard.
ResponderEliminar¿Será posible Mix?
Muy entretenida la historia, confieso que me ha ido seduciendo, y espero con ansias cada capítulo.
Hola Liz...
EliminarDifícil respuesta... todavía no lo sé. La mitad de los Wlleslley son gozadores y de mente más abierta. La otra mitad es conservadora y de mente más cerrada...
Lamentablemente a nuestra chica le tocó la mitad más difícil... veamos que pasa.
Gracias por comentar.
MUY EMOTIVO Y REVELADOR!!!!!!!!!!!! AYYY GRACIA PIENSALO Y MEJOR DILE LA VERDAD A RICHARD SI DE VERDAD LO QUIERES PARA TI!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarFELIZ FIN DE LA BRUJIS VENEZOLANA!!!!!!!!!!!!!!
Esto es solo una pincelada, de lo que le espera a Gracia si no dice la verdad.
EliminarAntes de que vengan los deliciosos besos de Richard, ella debe confesar... o si no... está condenada...
Feliz fin de semana para ti, mi querida brujis Venezolana.
PD: Una pregunta, nada que ver con esto: ¿Quién murió en Venezuela?, ¿Un candidato a la presidencia?, ¿O fue este señor que está detenido, Leopoldo López?
Espero tú respuesta.
hola mix no el que asesinaron es un candidato opositor del partido de gobierno, en mi pais se viven tiempos un poco tensos y se quieren cambios que se buscan en las venideras elecciones del 6-12 donde elegiremos a los nuevos diputados de la asamblea legislativa nacional, Leopoldo lamentablemente continua preso.
EliminarHola
EliminarGracias por la respuesta, ahora tengo las cosas más claras.
Que lamentable es, cuando las personas se cierran a todo tipo de ideología o pensamiento que sea distinto al de ellos. Y llegar a privar de libertad a una persona... lo encuentro aberrante...
Mix eres maluca llevas mucho tiempo y nada de beso. pero te digo que este ca´pitulo me dejó mal, la pobre Sofi sufrío muxo por culpa del tío. Solo espero que a Gracia no le pase lo mismo. Yo si tengo la esperanza que algo pase y el la perdone. Sabes lo que me gustó muxo, las fotos. En verdad hay un pasado y un presente.
ResponderEliminarFelicidades está muy entretenida la historia.
Gracias Marta por tú comentario. Se hace lo que se puede. ;)))
EliminarPor eso niña, siempre hay que decir la verdad, y nada de ocultar las cosas, porque nunca jamás podrás tapar el sol con un dedo. Ojalá nuestra Gracia tenga suerte y el la perdone.
Gracias por comentar.
Mixx!!!! Me encanto, la verdad es q a pesar de que Sofi fue muy directa creo q por fin Gracia tuvo la oportunidad de desahogarse y contar su verdad. Ahora sabe cómo podría reaccionar Richard, La parte de la historia de Sofi es muy triste en verdad que ha sufrido,,,,, Sigo a la espera de un súper beso entre esa pareja q nos encanta.....
ResponderEliminarGracias Mixxx encantada con el capítulo, sabes lo que pienso de tu maravillosa manera de escribir :))
Besos
KG
Hola Karla.
EliminarA mi me encanta tú comentario, porque se nota que disfrutas la historia.
Yo creo que Sofi era necesaria, así Gracia se desahoga. Es muy grande el peso que ella lleva encima. Veamos si se atreve a contar la verdad...
Besos para ti también.
PD ... Te cuento un secreto... ya se besaron... pero no se lo digas a nadie... ;))))))))))))))))))))))))
Oohhhhhh!!!!!!! Pero nosotras queremos saber massssss, esos besos no pueden pasar desapercibidos jijijiji!!!!!
EliminarEspero el martes con ansias ;)))) y porsupuesto que disfruto leyendo esta historia, gracias Mixx
Besos
KG
Richard... Richard... sus besos son la condena de nuestra amiga...
Eliminar;)))))))))))))))))
Cada vez me sorprende más tú historia mixxxxxxxxx, es maravillosa, hoy he llorado con Sofi.
ResponderEliminarGracias... a mi también me conmovió su historia...
EliminarAyyy Mix necesita!! Se me hace muyyy corto!!! Me encanta como siempre!! Muchos besos!!
ResponderEliminar